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Guanajuato, capital del estado, con una rica historia ligada a la época de la Colonia y a la Independencia. Reconocida por su centro histórico y minas adyacentes como Patrimonio de la Humanidad, debe seguir siendo un espacio para el goce y disfrute de sus habitantes y visitantes.
A lo largo del tiempo, nuestra ciudad se ha consolidado como un centro cultural y turístico de relevancia internación, sede del Festival Internacional Cervantino y escenario de tradiciones arraigadas en su pasado minero y libertario.
Nuestra intención es que así se mantenga la que fuera capital de la República en 1855, y que hoy continúa sorprendiendo a propios y extraños por su arquitectura colonial y su singular red de túneles viales.
Para lograrlo, es fundamental proteger y preservar su imagen arquitectónica y sus manifestaciones culturales, garantizando al mismo tiempo una ciudad sostenible y funcional para beneficio de sus habitantes, su población flotante -integrada en buena parte por estudiantes universitarios- y los miles de visitantes que cada año fortalecen la economía local.
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El turismo, sin duda, ha sido en las últimas décadas una fuente esencial de ingresos para numerosas familias guanajuatenses, por lo que debemos asegurar servicios públicos eficientes: movilidad ordenada, recolección oportuna de residuos, alumbrado público adecuado, seguridad y sustentabilidad hídrica.
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Con el ánimo de contribuir a ese propósito desde el ámbito legislativo, he impulsado la eliminación del cableado aéreo en desuso, y el diseño de un programa para trasladar el cableado útil a infraestructura subterránea, con el fin de mejorar la imagen urbana y reducir riesgos. |
| Asimismo, para mantener vivas las tradiciones que nos dan identidad, promovimos que la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato, con más de 62 años de trayectoria artística, sea declarada patrimonio cultural intangible del Estado, al igual que el Teatro Universitario, los Entremeses Cervantinos y los Juglares de Guanajuato. |
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Finalmente, es prioritario mantener vigente el proyecto de construcción de la presa La Tranquilidad, que permitirá garantizar durante las próximas décadas el abasto de agua potable para la población y las actividades económicas de la capital. Hoy, sólo uno de cada cien litros de agua de lluvia es aprovechado, por lo que urge fortalecer la infraestructura de captación y almacenamiento. |
Guanajuato merece seguir siendo una ciudad viva, ordenada, cultural y sustentable. Ese es el compromiso que guía nuestras acciones legislativas.
